En una era de abundante información, el poder de la narración se destaca como una herramienta estratégica para construir significado, reflexionar sobre nosotros mismos, conectar con los demás y compartir nuestra comprensión del mundo. "Stalo na Lomba do Pinheiro" (Instantánea en la Colina) explora la creación de imágenes visuales basadas en la oralidad y una escala de proximidad para desafiar el control e influir en la creación de historias sobre quiénes somos y nuestros contextos vitales más directos.

El mural de Urmeer es el resultado de un taller con usuarios habituales del centro comunitario. El artista empleó diversas metodologías para catalizar la construcción de una historia colectiva. En el proceso, y considerando las limitaciones de las palabras para transmitir ciertas ideas, se prestó especial atención al color, que se convierte en un narrador directo y metafórico, capaz de transmitir las emociones y reflexiones que surgieron durante la obra y que aparecen en ella solo en unos pocos símbolos; después de todo, la narración no se trata simplemente de crear una narrativa, sino de moldear la percepción. Se trata de decidir qué historias se contarán, cómo se contarán y quién podrá contarlas.