Las diferentes maneras de abordar el tiempo desempeñan un papel importante en la exposición. En MARGS, mientras algunos artistas nos invitan a observar de cerca motores, líneas y animaciones que se mueven en una danza lenta ante nuestros ojos, otras investigaciones se centran en cierta hiperaceleración, imaginada futuristamente desde la década de 1980, pero que alcanza un nuevo nivel hoy en día con la inteligencia artificial, los numerosos sistemas de vigilancia que nos rodean y el exceso de tiempo frente a la pantalla.

Una vibración no anula a la otra. Coexistiendo y creando tensión, las obras de este Snap nos recuerdan el aspecto individual y, al mismo tiempo, colectivo de un simple grano de arena que se arrastra en el fondo de un reloj de arena. Diminuto, forma parte de un todo. Sin su presencia, carecemos del movimiento que sugiere el paso del tiempo. De igual manera, los artistas aquí reunidos reflexionan sobre el tiempo, a través de pequeñas acciones, y sugieren una relación con él elástica, ficticia y, a veces, ligeramente melancólica.